La siguiente información fue elaborada para este sitio web por profesionales médicos y expertos en salud pública, a partir de fuentes del gobierno canadiense, además de otras fuentes científicas y médicas. Esta información no constituye asesoramiento médico. Si tiene alguna pregunta con respecto a la vacunación contra la COVID-19, consulte siempre con un proveedor de atención médica calificado.
Si desea saber si puede recibir la vacuna contra la COVID-19 en su región, o sacar turno para vacunarse, haga clic en el siguiente enlace para acceder a la información más actualizada y a las opciones para sacar turno en su lugar de residencia.
Columbia Británica
Alberta
Saskatchewan
Manitoba
Ontario
Quebec
Nuevo Brunswick
Nueva Escocia
Terranova y Labrador
Isla del Príncipe Eduardo
Territorios del Noroeste
Nunavut
Yukon
Las vacunas contra la COVID-19 aprobadas para su uso en Canadá no contienen huevo, gelatina, carne de cerdo, carne vacuna, productos fetales, mercurio, formaldehído, aluminio, timerosal o látex, ni contienen ningún ingrediente que podría restringirse por razones dietéticas o religiosas.
Se puede encontrar la lista completa de ingredientes de cada vacuna en los siguientes enlaces:
Pfizer-BioNTech: https://www.canada.ca/en/health-canada/services/drugs-health-products/covid19-industry/drugs-vaccines-treatments/vaccines/pfizer-biontech.html
Moderna: https://www.canada.ca/en/health-canada/services/drugs-health-products/covid19-industry/drugs-vaccines-treatments/vaccines/moderna.html
Johnson & Johnson: https://www.canada.ca/en/health-canada/services/drugs-health-products/covid19-industry/drugs-vaccines-treatments/vaccines/janssen.html
No se salteó ningún paso y se siguieron todos los procedimientos de seguridad. Se las desarrolló rápidamente gracias a los avances tecnológicos y a que se aceleraron las etapas no médicas de la aprobación (trámites burocráticos y sellos).
No. La proteína utilizada en la vacuna nunca interactúa con el ADN ni lo altera. Esta se destruye de forma natural a las pocas horas de la vacunación y deja solamente las instrucciones para que se generen anticuerpos si alguna vez se expone al virus que causa la COVID-19.
El Ministerio de Salud de Canadá aprobó la vacuna de Pfizer-BioNTech para su uso en niños a partir de los 12 años
y las vacunas de Moderna, AstraZeneca y Johnson & Johnson para su uso en personas mayores de 18 años.
Actualmente, se están llevando a cabo estudios para determinar la seguridad y la eficacia de las vacunas contra la COVID-19 en los niños más pequeños.
En este momento, en Canadá, no se pueden administrar las vacunas contra la COVID-19 junto con otras. Sin embargo, esto es distinto en los Estados Unidos, donde se puede recibir cualquier vacuna independientemente del momento; incluso es posible recibir de manera simultánea, el mismo día, una vacuna contra la COVID-19 y otra vacuna. Consulte con su proveedor de atención médica si esto es conveniente para usted.
Casi todos podrán recibir la vacuna de manera segura, aunque es posible que una cantidad muy reducida de personas deba evitarla por tener alergias graves a algunos componentes de la vacuna. En la situación actual de riesgo de contraer COVID-19, se puede vacunar a la mayoría de las personas. De hecho, aquellas con afecciones de salud subyacentes que sean clínicamente muy vulnerables pueden ser más propensas a sufrir las complicaciones de la infección por la COVID-19 y deben recibir la vacuna lo antes posible.
En general, es seguro vacunarse contra la COVID-19, incluso si se está recuperando de una enfermedad (por ejemplo, del herpes zóster), pero si tiene una nueva enfermedad que le impide realizar sus actividades habituales, debe esperar a estar completamente recuperado para vacunarse. Así se podrá dirimir entre los posibles efectos secundarios de la vacuna y el empeoramiento de la otra enfermedad. Además, si se está recuperando de una enfermedad infecciosa, aguardar a la recuperación garantiza que no se esté poniendo a otros en riesgo de contagiarse cuando venga a vacunarse.
Si tiene síntomas de COVID-19, debe quedarse en casa y realizarse la prueba.
Casi todos podrán recibir la vacuna de manera segura. No hay preocupaciones significativas sobre la seguridad para las personas cuyo sistema inmunitario está debilitado o que tengan enfermedades autoinmunes. Es posible que la vacuna no funcione como se espera en personas con un sistema inmunitario debilitado. En caso de tener un sistema inmunitario debilitado o una enfermedad autoinmune, consulte con su proveedor de atención médica sobre las vacunas contra la COVID-19.
La menstruación es un proceso complejo y puede verse influida por muchas situaciones, como los cambios ambientales, el estrés, el sueño y algunos medicamentos. De hecho, se considera que el revestimiento del útero es una parte activa del sistema inmunitario. Cuando este sistema está trabajando intensamente porque se vacunó o enfermó, puede cambiar la forma en que reacciona el endometrio. Por esto, es posible que la vacuna afecte de algún modo a la menstruación.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que toda vez que se observe un grupo grande de personas, siempre habrá quienes experimenten cambios en el ciclo menstrual. Dado que se están administrando cientos de millones de vacunas en todo el mundo, habrá quienes experimenten cambios en su ciclo menstrual. Los investigadores confían en que la vacuna es segura y en que no hay datos suficientes que indiquen que haya que preocuparse por posibles cambios en el ciclo menstrual.
La vacuna contra la COVID-19 no se secreta después de la administración, por lo que tampoco se espera que estar cerca de personas recientemente vacunadas afecte al ciclo de nadie.
Todo cambio que experimente en el ciclo menstrual después de recibir la vacuna será temporal, por lo que no debería ser motivo para no vacunarse. No obstante, ante cualquier duda al respecto, se debe consultar con el médico, ya que también pueden ocurrir atrasos en la menstruación por otros motivos.
La Sociedad Canadiense de Obstetricia y Ginecología (SOGC), el Comité Consultivo Nacional sobre Inmunización y los expertos en salud pública de Canadá aconsejan que se les dé prioridad a las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia y que se les ofrezca la vacunación en cualquier momento (en cualquier trimestre) durante el embarazo y la lactancia si reúnen los requisitos y no hay contraindicaciones. Si tiene dudas y está embarazada, planea quedarse embarazada o está amamantando, consulte con su proveedor de atención médica sobre las vacunas contra la COVID-19.
No hay pruebas de que ninguna vacuna, incluida la vacuna contra la COVID-19, afecte a la fertilidad, ni de las mujeres ni de los hombres.
Hay muy pocas razones por las que no debería recibir la vacuna contra la COVID-19.
No debe vacunarse en los siguientes casos:
1. Si tiene alergias graves a alguno de los ingredientes de las vacunas: un ingrediente de las vacunas de ARNm que se ha asociado a una alergia poco frecuente, pero grave, (anafilaxia) es el polietilenglicol (PEG), que puede encontrarse en algunos cosméticos, productos para el cuidado de la piel, laxantes, algunos alimentos y bebidas procesados y otros productos. Nota: Las vacunas de AstraZeneca y de Johnson & Johnson no tienen PEG. Un ingrediente de las vacunas de AstraZeneca y Johnson & Johnson que se ha asociado a una alergia poco frecuente, pero grave, es el polisorbato 80. Este también se encuentra en preparados médicos (por ejemplo, aceites vitamínicos, comprimidos y agentes anticancerígenos) y cosméticos.
2. Si tuvo una reacción potencialmente mortal a una dosis anterior de la vacuna contra la COVID-19 o a cualquier otro componente de la vacuna.
Consulte con su proveedor de atención médica si ha tenido una reacción anafiláctica, pero desconoce la causa. Las reacciones alérgicas graves y potencialmente mortales a las vacunas (anafilaxia) son extremadamente raras, mucho más raras de lo que la gente piensa. La anafilaxia siempre se puede tratar y, en muchos casos, incluso se puede prevenir. Todos los proveedores de atención médica que administran vacunas en Canadá están obligados a recibir formación acerca de la anafilaxia, a vigilar activamente si esta aparece y, llegado el caso, a tratarla de inmediato. Raras veces, según las recomendaciones de un alergólogo y de un responsable médico, se podría administrar una vacuna en un entorno hospitalario.
No se recomienda beber alcohol antes de la cita de vacunación ni asistir en estado de ebriedad. Esto no se debe a un problema de seguridad de la vacuna (es decir, a que el alcohol podría interferir con la vacuna), sino a que el proveedor de atención médica necesita obtener previamente el consentimiento informado de la persona a quien se le administrará la vacuna. El alcohol puede disminuir su capacidad para comprender la información médica en su totalidad y para hacer preguntas.
No hay estudios sobre la relación entre el consumo de alcohol y la eficacia de las vacunas contra la COVID-19. Las personas que luchan contra el trastorno por consumo de alcohol (TCA) pueden tener un sistema inmunitario deprimido (más débil) y deben hablar con su proveedor de atención médica. La opinión de los expertos es que no se espera que un consumo moderado de alcohol tenga un efecto negativo en la respuesta inmunitaria a la vacuna.
La vacuna contra la COVID-19 es segura para quienes consumen cannabis.
Sin embargo, le recomendamos que no esté bajo los efectos de la droga en el momento de vacunarse. Esto no se debe a un problema de seguridad de la vacuna (es decir, que la marihuana podría interferir con la vacuna), sino a que el proveedor de atención médica necesita el consentimiento informado de la persona a quien se le administrará la vacuna. . La marihuana puede disminuir su capacidad para comprender la información médica en su totalidad y para hacer preguntas.
No hay estudios sobre la relación entre el consumo de cannabis y la eficacia de las vacunas contra la COVID-19. Hay nuevos indicios que indican que fumar cannabis puede tener consecuencias negativas en el sistema respiratorio y la competencia inmunitaria de una persona, por lo que es todavía más importante vacunarse contra la COVID-19 para protegerse del virus si se fuma.